Los MP3 ponen en peligro la
audición de los adolescentes antes de tiempo
Uno de cada cuatro adolescentes corre el riesgo de desarrollar una pérdida auditiva a una edad temprana por usar reproductores MP3, según concluyen los investigadores de la Universidad de Tel Aviv.
Los resultados del estudio, publicado en la revista International Journal of Audiology, demuestran claramente que el uso de iPods, teléfonos inteligentes y demás reproductores MP3 pueden ser perjudiciales para la audición de los adolescentes.
“Dentro de 10 ó 20 años, será demasiado tarde para darse cuenta de que toda una generación de jóvenes sufre pérdida de audición mucho antes de lo que se espera por envejecimiento natural”, explica Chava Muchnik, profesora de la Facultad de Medicina Sackler y el Centro Médico Sheba.
Pérdida de audición a los 30
Los
adolescentes escuchan música en los dispositivos MP3 y se someten a una
exposición constante de ruido a un volumen muy elevado, lo que puede causar una
pérdida de audición lenta y progresiva. Es decir, la persona afectada solo
descubrirá que se ha producido un daño después de haber estado muchos años
escuchando música alta a través de sus auriculares. Para entonces, será
demasiado tarde.
Los adolescentes que escuchan música a todo volumen, podrán llegar a
experimentar que su audición se deteriora al cumplir los 30 ó 40 años. Una edad
mucho más temprana que las generaciones anteriores, advierte la profesora
Muchnik.
El estudio
La primera
parte del estudio incluyó a 289 participantes de 13 a 17 años a los que se les
pidió que respondieran un cuestionario sobre sus hábitos de escucha de estos
dispositivos. En particular, acerca del volumen al que preferían escuchar la
música y el tiempo de escucha.
En la segunda parte, se realizaron mediciones del volumen y el tiempo de
escucha a 74 adolescentes tanto en ambientes silenciosos como ruidosos. Los
niveles de volumen medidos se utilizaron para calcular el riesgo potencial para
la audición, en base al criterio establecido por la normativa de seguridad y
salud en el entorno laboral.
Según la profesora Muchnik, los resultados son preocupantes. El 80% de los
adolescentes usan estos dispositivos de música regularmente, el 21% los usa de
una a cuatro horas diarias, y el 8% los utiliza más de cuatro horas
consecutivas. Estos resultados, junto con los datos obtenidos de las mediciones
acústicas, indican que una cuarta parte de los participantes corren un grave
riesgo de padecer una pérdida de audición.
Establecer un criterio de riesgo
La normativa de
seguridad y salud en el entorno laboral es en la actualidad la única referencia
para medir el daño auditivo de una exposición continua a ruidos elevados. Sin
embargo, según la profesora Muchnik, existe una necesidad imperiosa de
establecer un criterio de riesgo específico para la exposición al ruido de la
música, si queremos prevenir este tipo de pérdida de audición.
Por ahora la única esperanza es que los fabricantes adopten la normativa
europea en sus productos, que limitan la potencia de los aparatos electrónicos
como los MP3 a 100 dB. En la actualidad, algunos modelos pueden llegar a
alcanzar un volumen de hasta 129 dB.
Fuentes: www.sciencedaily.com y www2.tau.ac.il
No hay comentarios:
Publicar un comentario